¿Cuál fue el catalizador que te llevó a fundar Awakened Woman?
Era mi divorcio. Al ser madre/esposa/cuidadora/cuidadora, me perdí en mis roles. Empecé a tener ansiedad. No sabía quién era. No sabía lo que disfrutaba por mi cuenta. Fue aterrador, pero mi divorcio me obligó a descubrir quién era.
Me había sentido sola en mi viaje para encontrarme a mí misma. Empecé a escribir, porque no hablaba con nadie. Una noche, me encontré escribiendo y me di cuenta de que otras mujeres necesitaban escuchar mi historia. Así es como escribí mi libro. Comencé a contribuir a Thrive Global. Las mujeres podían identificarse con mi despertar. Así surgió Mujer despierta, cuando empecé a integrar las historias de otras mujeres. Visita nuestra pagina de Sexshop al por mayor y ver nuestros nuevos productos que te sorprenderán!
Dices que las mujeres deben «salir contigo mismas antes de salir con otras». ¿Qué quieres decir con eso?
Una de las cosas que hice cuando comencé mi viaje fue tener citas conmigo misma. Probé cosas que nunca había hecho antes, y las hice solo. Fui al cine, a restaurantes, al campo de tiro, al pole dance, a la clase de sedas aéreas y más. Hice lo contrario de lo que hizo la vieja Yvette. Así fue como descubrí quién era por mi cuenta. Ahora estoy en una relación y todavía tengo mis citas a solas. Es respetuoso de mi ‘tiempo para mí’.
Dices: «Eres suficiente. No necesitas a un hombre». Por favor, aclare a qué se refiere con eso.
‘No necesitas un hombre’ para mí es que estás bien sin una relación. No necesitas la validación de un hombre para sobrevivir. Soy suficiente por mi cuenta, pero disfruto de la compañía de mi pareja. Me complementa. Es uno de mis mayores animadores. Si rompiéramos, estaría molesto, pero estaría bien.
¿Puedes compartir algunos consejos para aumentar el amor propio?
Una de las cosas más importantes es ser sincero contigo mismo y con los demás. Puede ser aterrador decirte a ti mismo y a los demás la dura verdad. Nunca sentí que era suficiente, y necesitaba averiguar por qué me sentía así. Tuve que cavar profundo para descubrir la verdad. Volví a la infancia y vi que tenía la creencia de que si no era perfecta, no merecía nada bueno. Aprendí a ser amable conmigo misma.